La dirigencia nacional de Morena ha lanzado los lineamientos de la convocatoria para las ocho gubernaturas y la jefatura de gobierno de la Ciudad de México. De hecho, los fragmentos ponen principal acento en que, para el futuro inmediato, serán cinco hombres y cuatro mujeres quienes encabezarán el movimiento en las próximas elecciones del 2024. Con este escenario, podemos ir visualizando el panorama que se avecina, pues hemos hablado, desde hace algunos meses, de la ventaja que han ido acumulando varios aspirantes que levantaron la mano.
Desde el punto de vista de muchos analistas, Claudia Sheinbaum, coordinadora de la defensa del voto para el ejercicio electoral, tendrá una influencia poderosa para proponer perfiles. La cuestión es que, en distintos escenarios, no todos los aspirantes garantizan el mismo arrastre. Por ejemplo, en Puebla, el efecto de Morena, para este proceso venidero, es positivo siempre y cuando el abanderado sea Alejandro Armenta. De ahí la importancia de poder determinar quiénes serán los 9 elegidos. Tienen que ser, claro está, los mejores para poder alcanzar el mayor número de conquistas.
Siendo así, Morena puede ganar las 8 gubernaturas y la propia Ciudad de México. Es ahí donde radica la importancia de decidirse por los mejores cuadros del movimiento para que puedan incidir en el resultado final de la votación. Por esa razón, se necesita liderazgo para que las condiciones políticas sean idóneas. Si es así, es muy probable que se repita el proceso que vivimos en 2018 y, con esa inercia, Morena refrende el triunfo en Veracruz, Chiapas, Puebla, CDMX, Morelos y Tabasco. De hecho, es posible que, para este ejercicio, el lopezobradorismo de la batalla en Yucatán, Jalisco y Guanajuato.
Todo dependerá, desde luego, de los actores que postulen para las boletas. Si nos guiamos por el acuerdo de la dirigencia nacional de Morena, es muy claro que, la mayor parte de perfiles, serán evaluados por una encuesta. En este caso, y partiendo de la premisa establecida para la equidad, tenemos una lectura muy clara de cómo puede quedar el mapa electoral en las entidades federativas.
Vayamos por partes. Para los hombres es muy claro que las entidades serán: Puebla, Chiapas, Tabasco, CDMX y Jalisco. Y para las mujeres: Guanajuato, Yucatán, Veracruz y Morelos. De modo que, con esa premisa, habrá que ir al otro escenario de los números que, al fin y al cabo, serán la mejor prueba de las preferencias que existen hoy en día. O sea, del mismo modo que la lógica apuntaló a Claudia Sheinbaum a la coordinación, esa posición inmejorable la tienen en sus manos muchos cuadros en las entidades federativas que se jugarán.
Una de ellas es la CDMX. En ese sentido, todas las direcciones apuntan a Omar García Harfuch. Cualquiera que tenga alguna duda, tiene todo el respaldo de Sheinbaum. Lo mismo sucede en Puebla. Incluso, todos los estudios de opinión dicen que, para el proceso interno, quien más sobresale es Alejando Armenta. Hay quienes dicen que será Ignacio Mier, sin embargo, el expresidente de la Mesa Directiva del Senado es quien más garantiza el triunfo de Morena en las urnas.
En Tabasco, todas las condiciones están dadas para que Javier May Rodríguez, sea el abanderado de Morena. Y Jalisco, que dará la batalla ante el dominante paso de Movimiento Ciudadano en aquel punto, es muy probable que postule a Carlos Lomelí.
Si los pasados son muy claros, donde no tenemos margen de duda son, ni más ni menos, en los estados de Chiapas, Veracruz y Morelos
En Chiapas, por ejemplo, todas las encuestas que se han publicado coinciden en la enorme ventaja de Eduardo Ramírez, actual coordinador de los senadores de Morena. Es, después de Veracruz, la entidad federativa que prácticamente tiene a un virtual abanderado, no solo por el tema de los estudios de opinión, sino por el efecto tan grande que están generando en esos territorios. Dadas las circunstancias, “El Jaguar”, como lo conocen, se ha convertido en un fenómeno social. Lo mismo pasa en la capital de Chiapas, como en las comunidades y municipios, donde Ramírez concentra multitudes. De hecho, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, le lleva -al segundo lugar- 23 puntos de diferencia. Hablamos, en términos políticos, de un triunfo contundente.
Y para Veracruz, claro está, será la titular de la Secretaría de Energía, Roció Nahle. No hay duda de ello. Y entre esos mismos territorios que serán encabezados por mujeres, está la entidad de Morelos. Todo apunta a que Lucia Meza Guzmán, sea la abanderada del lopezobradorismo, al menos los números la sitúan en esa posición.
Para el estado de Yucatán, la única mujer que figura en el mapa de aspirantes internos de Morena es Verónica Camino Farjat. De hecho, cada vez su nombre se posiciona más y, en esa lógica, tiene presencia para competir.
Quizá Guanajuato sea una incógnita. Sabemos que será una mujer, pero está muy pareja la disputa interna. Para el caso de los demás, es muy probable que ese preludio, si hacemos un ejercicio guiado por la lógica, sea el más idóneo, pues lo fundamentan las encuestas de mayor credibilidad. Y, de mantenerse esa tendencia, que es muy difícil que se mueva a estas alturas, en unas semanas estaremos hablando de los nombramientos que anticipamos en este espacio de opinión.