Parece que la alcaldesa de la Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, no tiene llevadera a la hora de los pleitos. No contenta con iniciar una lucha intestina en contra de vecinos que realizan activismo desde la izquierda, hora abre un frente adentro de la propia alianza. Esa que la llevó a ser alcaldesa.
Maxta González es presidenta de la Red Jóvenes por México en la Ciudad y además, es Diputada en el Congreso de la Ciudad. Hace unos días, intentaba brigadiera brindando servicios y atención en el distrito que la eligió, pero aquello ofendió a la socia ahijada de Ricardo Monreal que no solo utilizó el brazo vecinal para amedrentar a la diputada, sino que amenazó a una de las empleadas de la alcaldía con que la Unión de Tepito la podría desaparecer “por tan solo 15 mil pesos”.
A Maxta González se le golpeó, ofendió y amenazó.
El drama de una diputada tratando de servir llegó a redes sociales porque se atrevió a grabar. Logró documentar los abusos y también pudo evidenciar que, al menos en la Ciudad, una alianza nuevamente con los partidos de sus agresores serán muestra del pacto de impunidad.
La diputada que estaba enfilada en el PRI mientras Sandra Cuevas saltaba entre el PRD y Fuerza por México tiene bastante que exigirle a su dirigencia, comenzando por pedir explícitamente una disculpa pública a cargo de la flamante adoradora de Gucci y Prada.
Twitter: Así el desastre que tiene la ahijada de Monreal, Sandra Cuevas, en la Cuauhtémoc, tiene criminales porros como funcionarios que se dedican a amenazar a la gente, a comerciantes, pero ahora le toco a una diputada del PRI, sus aliados.
Los golpes contra vecinos y contra Morena, escándalos por lanzar billetes pegados a pelotas, desacatos judiciales, extorsiones a comerciantes de la vía pública para eliminar rótulos artísticos y colocar un sello simplón de la Alcaldía Cuauhtémoc se quedan cortos ante una acusación que obliga a la Fiscalía General de la República a iniciar investigaciones: el cártel Unión de Tepito trabaja para ella y estaría dispuesto a agredir a Myriam “N”, que en algún momento fue su secretaria particular, por tan sólo esa cantidad: los 15 mil pesos de Sandra Cuevas.
Parece que la vida se hace barata cuando se mira a través de funcionarias dispuestas a destrozarlo todo: igual una alianza que una gestión. Ojalá su jefe político, Ricardo Monreal, pueda anticipar y prever las acciones de su ahijada, no vaya a ser que en algún momento las amenazas y los capos vayan contra él.
Myriam denunció al coordinador de Planeación del Desarrollo y Buena Administración por intento de feminicidio, pero la Fiscalía clasificó el delito como amenazas. En junio, según el Reforma, se presentó una ampliación de la denuncia después de que Ávalos iniciara una serie de actos intimidatorios por instrucciones de Sandra Cuevas y hasta por uno de sus asesores llamado Miguel “N”, llegando hasta la pareja sentimental de la funcionaria.
Sandra Cuevas es huérfana de partido, ha estado en todos y en ninguno pero las agresiones se acumulan y aquello que los opositores tildaban como “persecución política” hoy explota en sus manos: la propia alcaldesa a la que tanto apoyaron, agrede a las diputadas del PRI, amedrenta a los aliancistas y ni hablar de la decepción ciudadana para sus votantes… pero la Unión de Tepito, ya es demasiado.
Con razón tanto odio expresa contra el Secretario Omar García Harfuch, quien ha logrado revertir la tendencia de criminalidad y beneficiar a la CDMX con estrategias para mantener la tranquilidad, y quien, por cierto, ha sufrido atentados por parte de la misma corporación criminal que es acusada de mantener servicio y alianza para la Alcaldesa Gucci Prada.
Ojalá que haya justicia para la Diputada Maxta, que los aliancistas no lo pasen por alto y que la Fiscalía brinde justicia para Myriam y la diputada.