En primavera da flor el clavel.

Pero ¿en qué tiempo da dicha el amor?

enel recuerdo...

En primavera da aroma el rosal.

Pero ¿en qué tiempo da fuerza el dolor?

enel silencio...

Jaime Torres Bodet

¡Ay dolor! Ya me volviste a dar, así debe acordarse Gabriel García al ver el trato recibido desde Palacio en estos últimos días. El día de hoy la misma información semi confidencial es compartida por cierto número de columnistas al mismo tiempo, se entiende que la fuente solo puede ser una misma y esta avisando de su dolor.

López Obrador lo sabe y como tal, debe leer en las columnas de Carlos Loret, Riva Palacio y Maldonado, que uno de sus colaboradores más cercanos y quien ha bregado con él a través de muchos años hoy se encuentra muy dolido.

Andrés Manuel puede desmentir lo dicho desde la mañanera, ya sabemos que él siempre tiene otros datos, pero en esta ocasión, debe estar preocupado porque si hay alguien que conoce todas las acciones, historias y seguramente hasta videos de la 4T es Gabriel García.

El destapador de Morena alías AMLO, descargó su enojo sobre su mejor operador político. Quien comandaba a los “siervos de la nación”, fue despedido de forma destemplada por quien ha sido su amigo, jefe y también colega en las operaciones político-electorales. Al menos pudo retomar su cargo senatorial. Si algún despistado pensó que lo mandaba para frenar a Ricardo Monreal, quedó demostrado que no, solo lo mandó a la congeladora política.

Algunos consideran que la ira contra Gabriel García fue excesiva, pues si bien es cierto que contra los resultados del 2018 Morena perdió 4 millones de votos, igual de cierto es que las encuestas esbozaban una pérdida aun mayor y que la 4t no ganara todas las entidades federativas que cosechó. Máxime con los magros logros de la administración federal en vacunas, inseguridad, desplome económico, desabasto de medicinas y una larga y descalabrada lista de múltiples yerros.

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Ante esa realidad, Gabriel García fue expulsado del primer círculo palatino, cuando esperaba mantenerse en el mismo y continuar construyendo la estrategia del voto con Andrés Manuel.

La decisión del macuspano de erradicar a Gabriel García de su grupo más cercano sigue también la lógica impuesta por los dos grandes grupos (o clanes) dentro de la familia cuatroteísta. En este caso, las implicaciones no son directas sobre los problemas que enfrenta la nación, probablemente sí en la forma en que los morenistas tienen que cuidar sus espaldas, especialmente porque la salida de Gabriel muestra también el canibalismo entre ellos mismos.

López Obrador podrá pensar que tiene otros datos, pero el dolor demostrado en prensa por Gabriel García y el temor a que se ventilen mayor número de videos, cochupos y “préstamos personales”; seguramente tiene muy preocupado al tabasqueño sobre lo que su colaborador pueda decir o hacer. Será momento de enfocar sus apapachos en su gente que hoy se siente herida, la necesitará para el 24. AMLO quien mejor conoce el rencor y cómo volverlo combustible para lograr sus metas, deberá lograr que el dolor hoy manifestado por Gabriel García (y otros morenistas desplazados), no se convierta en rencor, el cual puede desbarrancar el proyecto de AMLO.

Al dolor de García, deberá dar cariño, apapacho o la oposición debería pensar en acercarse al vapuleado colaborador para obtener videos y todo tipo de información.