El evento “Wings of Change Europe (WOCE)” se llevó a cabo los días 14 y 15 de noviembre de este año, siendo anfitriona la hermosa ciudad de Ámsterdam, en los Países Bajos, y como patrocinador principal a la aerolínea Koninklijke Luchtvaart Maatschappij, mundialmente conocida como KLM.
Ahí se reunieron líderes de la industria aeronáutica, así como los expertos y reguladores, con la finalidad de discutir los temas que más le interesan en este momento a la industria de transporte aéreo.
En este encuentro la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) dio una buena noticia -sobre todo para la gente viajera-, pues hizo públicos los datos hallados en un estudio realizado, que concluyen que, por el momento en Europa, la baja de tarifas aéreas está beneficiando a los usuarios de este medio de transporte.
Esto en parte por la recuperación que el propio mercado está teniendo posterior a la pandemia de COVID, y a que se está subcotizando la inflación; en palabras más claras: los precios en los boletos de avión están aumentando de manera más lenta con respecto a la inflación.
Según el propio informe de la IATA: “Las últimas cifras de tráfico muestran que las aerolíneas europeas se encuentran solo un 3,6% por debajo del pico de 2019. Los europeos viajan a pesar del entorno inflacionario: en junio, las tarifas aéreas promedio en Europa eran alrededor de un 16% más altas que antes de la pandemia. Sin embargo, eso está por detrás del índice medio de precios al consumo de la UE, que en junio se situaba un 20% por encima del nivel anterior a la pandemia.”
La importancia de esta información radica en que ahora sabemos, con datos duros, que las tarifas más baratas impulsan a los usuarios a ver al transporte aéreo como una opción, dato a destacar sobre todo en Europa, el continente mejor conectado, ya sea por vía terrestre, ferroviaria o aérea.
Además, el director general de la IATA Willie Walsh añadió: “Los viajes aéreos europeos continúan recuperándose con fuerza y están en camino de superar el punto de referencia de 2019 en 2024. La competitividad del mercado de transporte aéreo de Europa está manteniendo la inflación de las tarifas aéreas en un 16%, cuatro puntos porcentuales por debajo de los aumentos que hemos visto en el índice amplio de precios al consumo. Teniendo en cuenta la extrema volatilidad de los precios del combustible para aviones y los aumentos en los salarios de la fuerza laboral, este es un logro significativo y contrasta con los cargos en continuo aumento que imponen nuestros proveedores de infraestructura”
Recordarán que con anterioridad mencioné el alza en la tarifa aeroportuaria del Aeropuerto de Heathrow, en Londres, y que las principales líneas aéreas se habían quejado.
La Autoridad de Aviación Civil británica (CAA por sus siglas en inglés) autorizó un aumento para el impuesto aeroportuario del 56% ¿se imaginan que eso hicieran nuestras autoridades aeronáuticas en el país?, y no solo eso, al NATS (el símil del SENEAM de nuestro país), que es el proveedor de la navegación aérea, les autorizaron un aumento del 26%.
Evidentemente no es el único país que ha aumentado su carga impositiva en temas aeroportuarios; el ya muy polémico Aeropuerto de Schipol en Ámsterdam también hizo un aumento de su tarifa aeroportuaria del 37%, y eso sin contar el verano caótico que tuvo este año, donde pudimos observar largas filas para llegar a los edificios terminales; no me refiero a los automóviles, sino a la gente que se formaba para poder ingresar a las instalaciones aeroportuarias, originadas por la falta de personal que adoleció este aeropuerto durante la temporada vacacional.
Ahora bien, los reguladores europeos analizan dos puntos clave para mejorar las condiciones de competencia y con esto lograr que los pasajeros puedan acceder a más y mejores opciones.
El primero sería impedir la monopolización de la infraestructura aeroportuaria, dotando de una regulación más estricta que ayude a reducir las cargas impositivas. El segundo punto va más allá, y pretende llevar a cabo una reforma al reglamento de protección al consumidor “EU261″.
Para destacar otra intervención que hizo el director general de la IATA, Willie Walsh, antes debo abrir y cerrar un paréntesis que me parece fundamental. El territorio de nuestro país tan extenso, que fácilmente cabrían 23 de los 27 países que conforman la Unión Europea; eso nos coloca en una posición que, bien ejecutada la estrategia, podríamos ser potencia aeronáutica al ser pioneros.
Pero para la opinocracia del país, contraria al régimen de la 4T, lo que procede es quejarse amargamente de la próxima Aerolínea del Estado Mexicano, o sea de la nueva Mexicana de Aviación, y prefieren dar por quebrada una compañía de aviación que ni siquiera ha arrancado.
Ahora sí ¿qué dijo el director general de la IATA? “La recuperación del mercado del transporte aéreo europeo está trayendo consigo condiciones de mercado aún más competitivas. Los consumidores lo verán con más rutas y más aerolíneas para elegir. En total, el año pasado nacieron 20 nuevas aerolíneas en Europa. Esto es importante porque un mercado de transporte aéreo más competitivo hará de Europa un lugar más competitivo para hacer negocios”
A ver, ¿pero que me estás diciendo Wille?, ¿qué tan solo el año pasado nacieron en la 20 Aerolíneas en la Unión Europea? Es un hecho, dada la extensión de nuestro país, nuestra incipiente y disminuida aviación tiene que fortalecerse con más líneas aéreas.
Pero la cantaleta de hoy es que lo único que generará la nueva Mexicana es competencia desleal; y yo les pregunto, ¿en serio?, ¿competencia para una aerolínea troncal, dos bajo costeras, dos regionales, una chartera y las tres cargueras que tenemos actualmente?
No exagero, nuestra aviación comercial son: Aéreo Calafia, Aeroméxico (Aerovías de México), Aeroméxico Connect (Aerolitoral), Aerounión (Aerotransportes de Carga Union), Estafeta (Carga Aérea), Magnicharters (Grupo Aéreo Monterrey), Mas Air (Más de Carga), Transportes Aéreos Regionales (TAR), Vivaaerobus (Aeroenlaces) y Volaris (Concesionaria Vuela Compañía de Aviación).
Y la lista se acaba, ¡diez aerolíneas!, y queremos impedir la llegada de una más, mientras en Europa, solo en los últimos doce meses nacieron 20 líneas aéreas.
Reuniones de este tipo, como la “Wings of Change Europe” que aglutina a los más importantes actores del mundo de la aviación, nos permiten tener una visión más amplia de la industria; desde la carga tributaria y sus repercusiones, las medidas que tienen pensadas llevar a cabo, así como dar a conocer el crecimiento del transporte aéreo.
Queda esto para su reflexión y análisis: en lugar de criticar al gobierno por impulsar la creación de una nueva línea aérea, ¿no deberían sumarse emprendedores y crear todavía más? Desde la salida de Transportes Aeromar sigue vigente el vacío que dejó, y todavía hay rutas que no se han podido cubrir.
Sin duda todo acto de gobierno debe ser objeto de escrutinio, crítica, revisión y evaluación. De eso no tengo duda; pero aunque implique más trabajo de investigación y de búsqueda de información, bien podemos elevar el nivel del debate.
La nueva Mexicana de Aviación es un océano de oportunidades para ponerle la lupa encima; por supuesto que hay cosas que son perfectibles (como su fecha de arranque, por ejemplo). Pero ese ejercicio fiscalizador se vuelve nimio, pedestre y estéril si solo nos dedicamos a repetir (sin investigar) los que se dice en las redes sociales.