Con Xóchitl Gálvez cuando no es Chana es Juana.
Al escándalo del zafarrancho de su hijo Juan Pablo hay que sumarle la investigación publicada por SinEmbargo que demuestra que su hija Diana tiene dos actas de nacimiento, con datos distintos y con padres diferentes.
En un acta el nombre de la hija mayor de la panista aparece como Diana Vega Gálvez y su padre es Luis Ernesto Vega Chacón, con quien Xóchitl estuvo casada en 1987, y en otra su nombre es Diana Llamas Gálvez, registrada como hija de Francisco Llamas de la Fuente.
Es de llamar la atención que el primer hombre que registra a Diana como su padre trabajó en 2002, durante el gobierno de Fox, en el Instituto Nacional Indigenista como director de operaciones, siendo, colaborador cercano de Gálvez. Pero ella, en una mentira más, dijo a la periodista Ivonne Melgar, autora de un libro biográfico de la candidata, que el padre de su hija se fue cuando ella tenía seis meses de embarazo y no lo volvió a ver. Salió por cigarros sin mirar para atrás, como dicen en mi rancho, pero la presencia de Vega Chacón en el gobierno foxista deja al descubierto su falsedad.
Según los registros públicos ambas actas siguen vigentes, por lo que nos queda la duda sobre cuál ha sido utilizada por la hija de Xóchitl a lo largo del tiempo y con qué fin.
Al igual que el defenestrado hijo de la panista, Diana Vega o Diana Llamas forma parte del equipo de campaña de la candidata de Fuerza y Corazón por México, es decir, reciben dinero público y esto es lo que nos importa: nos están estafando.
Estoy de acuerdo que meterse con la familia de un candidato o candidata puede ser una atrocidad, pero estos dos angelitos, Juan Pablo y Diana, devengan un salario que sale de nuestros impuestos (aunque Juan Pablo ya renunció le tocó su parte) y lo menos que se pide es que exista honestidad.
El escándalo de estas dos actas salió a la luz el pasado viernes, previo al primer debate de hoy domingo 7 y el eclipse del lunes 8, además del desastre que se vive con la crisis con Ecuador, noticias que acaparan la atención, pero debe exigirse a la candidata explique por qué su hija tiene esa anómala situación, ya que podemos pensar mal y podrían existir operaciones fraudulentas. Con dos nombres y dos padres, vaya usted a saber.
El problema principal es que nos quieren dar gato por liebre.
Xóchitl repite como loro que con ella la corrupción se acabará y que estaremos como Alicia en el país de las maravillas cuando la pus brota desde el seno familiar y salpica, le guste o no, su campaña por la presidencia de México pues queda como lo que es: una mujer falsa.
Vamos a ver con qué nos sale Gálvez en el debate pero no es difícil adivinar que llegará con la espada desenvainada atacando a Claudia y vendiéndose como la mejor opción.
Nada nuevo. Sabemos que hoy como ha sucedido en toda su campaña, Xóchitl saldrá con su domingo siete.