No voy a analizar el desplegado que ha empezado a circular en redes sociales, en el que gente de Morena cuestiona al Instituto Nacional Electoral.

Lo firman los gobernadores y las gobernadoras de la 4T y un número reducido de integrantes del gobierno federal, del poder legislativo y de la dirigencia de Morena.

Lo que me interesa destacar no es el contenido del comunicado, sino su significado político en términos de la sucesión presidencial en el partido de izquierda. Como quiera que sea, lo reproduzco:

¿Ebrard ya rompió con la 4T?

Para propósitos de la sucesión presidencial en el oficialismo las firmas relevantes son las de la corcholata Claudia Sheinbaum Pardo y de los corcholatos Adán Augusto López Hernández y Ricardo Monreal Ávila, además de la del dirigente del partido, Mario Delgado Carrillo.

Las preguntas lógica son estas: ¿Y Marcelo Luis Ebrard Casaubón? ¿Por qué no firmó el titular de Relaciones Exteriores? ¿No lo invitaron? ¿No quiso Andrés Manuel López Obrador que el canciller firmara? ¿Marcelo no desea pelear con el INE? ¿Ya se ve el señor Ebrard fuera de Morena? ¿Ha llegado tan lejos la división en el partido de izquierda?