Mauricio Vila, gobernador panista de Yucatán, llegó hace seis años al poder envuelto en un aura de expectativas. A los pocos meses de su gestión recibió el reconocimiento, incluso, del presidente Andrés Manuel López Obrador, por su buen desempeño en temas como la seguridad, el crecimiento económico y el turismo.
Detrás de esa supuesta imagen de bonanza, prosperidad y éxito en la entidad, un sector fue severamente castigado, al grado de dejarlo en una inmensa crisis presupuestal. Y es que el abandono a la cultura en la gestión del panista quedará como un sello oscuro de su administración.
El amiguismo, los intereses creados, la comercialización con fines meramente lucrativos, la apatía hacia palancas fundamentales del sector, como la Orquesta Sinfónica de Yucatán, museos, teatros y las actividades populares, fueron la tónica en un gobierno que manifestó, en los hechos, año tras año, su desinterés hacia la cultura.
Todo ello se dio a pesar de que uno de los principales atractivos de esta entidad es su oferta cultural tan diversa.
Mérida, su capital, fue distinguida en el año 2017 como la Capital Americana de la Cultura debido al amplio conjunto de manifestaciones artísticas que se llevan a cabo de manera constante. Estas van desde exposiciones en museos y galerías, así como conciertos de agrupaciones musicales de diferentes géneros, tales como música de cámara hasta trova yucateca.
Pero tras bambalinas, los creadores y miembros de agrupaciones culturales no recibían sus sueldos, eran ninguneados por funcionarios estatales e, incluso, fueron despedidos tras manifestar su descontento por la situación imperante en el sector.
Teatros, museos, foros, cines comunitarios, padecieron el deterioro paulatino en la administración de Vila Dosal, un empresario que visualizó la cultura en términos mercantilistas. Los resultados que deja el panista en esa área, vital en el desarrollo de las sociedades, están a la vista de todos.
Manuel Redondo, el consentido del gobernador
El 6 de marzo de 2023 se creó el Comité de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY), organismo adicional al Fideicomiso Garante de la Orquesta Sinfónica de dicho estado y al Patronato de la Orquesta Sinfónica. De acuerdo con el gobierno estatal, su función consiste en asesorar y proponer estrategias para sostener la excelencia y reconocimiento de la sinfónica.
Los integrantes del mismo fueron presentados por la Secretaría de la Cultura y las Artes de Yucatán como “personas con amplio conocimiento en la institución musical”. Sin embargo, un nombre destacó de entre estos nombramientos, al ser alguien ajeno a la cultura yucateca: Manuel Redondo Peralta.
Como presidente de Fira Barcelona, empresa con sede en España y que se dedica a la organización de congresos y ferias, al tener representación en 20 países, Manuel Redondo fue comisionado para organizar, desde 2020, el evento Smart City Expo Latam Congress en la ciudad de Mérida, llevándose a cabo tanto de manera virtual como presencial. Dicho congreso lleva ya cinco ediciones, contando la de este año que está por celebrarse del 9 al 11 de julio.
Además, su empresa Pronus Events ha organizado la Cumbre Biósphera, en febrero de 2023 y julio de 2024; Apokalypsi, en octubre de 2023 y marzo de 2024; Cumbre por las Sociedades de Paz, Ch´abajel, en septiembre de 2023, así como el Gran Festival del Palacio de la Música, en diciembre del mismo año.
Los eventos tienen en común que en todos ellos funge como anfitrión el gobierno del estado de Yucatán y en algunos de ellos han participado tanto la OSY (en la edición 2023 de Smart City) como gente allegada a dicha institución. Por ejemplo, José Areán, el actual director artístico, fue curador de la primera edición de la Expo Apokalypsi, y Pablo Maya Ortega, quien recientemente ha sido llamado como director del Fideicomiso Garante de la Orquesta Sinfónica de Yucatán, fue el encargado de la curaduría de la segunda edición de dicha expo.
En 2019, Mauricio Vila, gobernador de Yucatán, anunció que su estado albergaría la Smart City Expo Latam Congress a partir del 2020 y por los siguientes tres años (2020, 2021 y 2022). El mandatario panista señaló que el evento sería de manera virtual en 2020 y 2021, y del 2022 en adelante ya de forma presencial.
El 17 de febrero de 2020 el gobernador firmó un contrato donde, a través de una adjudicación directa, la empresa FIRA Barcelona, organizadora del evento, recibió un total de 32 millones de pesos para realizar la logística de esa feria por un plazo de tres años.
Para el 30 de junio de 2022, FIRA Barcelona, el gobierno del estado de Yucatán y el Ayuntamiento de Mérida firmaron un nuevo acuerdo para este evento, que en ese año confirmó su realización en 2023 y 2024.
Este contrato se valoró en 69 millones 600 mil pesos, con un precio anual de 23 millones 200 mil pesos, de acuerdo con información que se publica en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), así como por la Secretaría de Fomento Económico y Trabajo de Yucatán. Dicho acuerdo fue firmado por el secretario de esa dependencia, Ernesto Herrera Novelo, y la apoderada legal de FIRA Barcelona, Pilar Martínez Letona.
Previo a su llegada a Yucatán, Manuel Redondo encabezó en 2019 la organización de Smart City en la ciudad de Puebla, pero esta ocasión fue la última, ya que desde el 2016, que fue la primera edición del evento en dicho estado, las aportaciones del erario fueron de la siguiente manera: 36 millones de pesos, en 2016, por parte del Ayuntamiento de Puebla; 37 millones, en 2017, del gobierno estatal, que también aportó 50 millones en el 2018, y 35 millones, en el 2019, con una suma total de 158 millones de pesos.
Esto causó una gran inconformidad dentro del Congreso del Estado, por lo que la Secretaría de Cultura y Turismo del gobierno de Puebla ordenó el desalojo de las oficinas de FIRA Barcelona que se encontraban en el inmueble llamado Patio de los Azulejos.
Los antecedentes de Manuel Redondo Peralta se han dado a conocer en diversos medios. El hecho más sobresaliente es su detención y el cateo a su agencia Super Travel, con sede en la Ciudad de México, por el delito de fraude agravado en contra de 13 personas a las que se les vendieron paquetes “todo incluido” para viajar al Mundial de Sudáfrica 2010, con un valor de 10 mil dólares por persona, y que no se concretaron, por lo cual procedieron a denunciar, lo que derivó en el arraigo de Redondo Peralta, quien fue posteriormente liberado.
Orquesta Sinfónica de Yucatán y su lucha por mantenerse en pie
La historia moderna de Yucatán registra varios intentos de tener una orquesta sinfónica que represente al estado. Dicho propósito se cumplió en el año 2001 gracias a la iniciativa de Adolfo Patrón Luján, hombre de negocios que logró reunir a un grupo de 150 personas para conformar el Patronato de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (POSY). En esos primeros años la orquesta era pequeña y casi itinerante, hasta que en febrero de 2004 se cristalizó el proyecto de la Orquesta Sinfónica de Yucatán.
El 18 de marzo de 2008, la gobernadora Ivonne Ortega expidió en el Diario Oficial del Estado el decreto de creación del Fideicomiso Garante de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (FIGAROSY), descrito en el artículo 1 como “una entidad pública paraestatal encargado de la administración y funcionamiento de la orquesta”.
En dicho decreto, con el número 69, se estipula también el compromiso del gobierno estatal de dotarlo de recursos para pagar y se especifica que los recursos que se destinen no deben ser menores a los del año anterior.
Sin embargo, el gobierno no ha cumplido. A partir del 2019 comenzaron los recortes al presupuesto, cuando un año antes recibieron la cantidad más alta hasta ahora, por un monto de 32 millones 016 mil 319 pesos.
En 2020 se le asignaron 28 millones 063 mil 745 pesos, pero para el 2021 se redujo de manera importante hasta quedar en 5 millones de pesos, lo que causó que representantes del POSY y del FIGAROSY tuvieran que sentarse a dialogar en agosto de 2021 con el gobernador Vila para conseguir 4 millones 500 mil pesos extra.
Para 2022 fueron 12 millones 500 mil pesos, lo que ocasionó que, para mitad de año, se agotara el presupuesto, por lo que de julio a octubre de ese año los sueldos fueron pagados con recursos propios del fideicomiso y aportaciones del patronato.
Todo ello se mantuvo en secreto hasta que trascendió en los medios que el ejecutivo estatal omitió el pago de la nómina de la primera quincena de noviembre y que, además, el presupuesto que se les iba a asignar en el 2023 sería sólo de 12 millones de pesos, los cuales sólo cubrirían la mitad del año.
Ese panorama cambió cuando en marzo de ese año se anunció que, como parte de los cambios realizados, entre los cuales estaba la creación del comité antes mencionado, el gobierno del estado se comprometió a cubrir la nómina por el resto del año.
Fuego en el teatro Peón Contreras
El Teatro José Peón Contreras, ubicado en Mérida, fue inaugurado el 21 de diciembre de 1908 y desde ese momento se convirtió en un emblema de la cultura en Yucatán que, a partir del 2004, fue la sede oficial de la Orquesta Sinfónica de Yucatán hasta que, el 1 de noviembre de 2023, se registró un incendio donde la parte más dañada fue el tercer nivel, afectando principalmente la cúpula y las cabinas de audio, así como la zona de butacas.
Asimismo, a través del peritaje realizado por personal forense de la Fiscalía General del Estado se dio a conocer que la causa oficial fue un corto circuito originado en la consola que controla la iluminación y el audio del teatro, que se ubica en el tercer piso, pero que se propagó hacia la parte superior.
Posterior al siniestro, exfuncionarios de las dependencias de cultura del estado dieron a conocer que las condiciones del teatro no eran las más óptimas puesto que, desde hacía tiempo, había desperfectos tales como fallas en el sistema eléctrico que datan del 2016, cuando se hizo la última remodelación bajo la administración del gobernador Rolando Zapata Bello.
También, en marzo de 2020 hubo un par de incidentes tales como la caída de una lámpara en pleno concierto, así como el desprendimiento de una moldura del techo del teatro que cayó sobre la escalinata principal y el lobby, en el mes de noviembre.
Estas fueron declaraciones de la exsecretaria de la cultura y las artes, Erica Millet Corona, dadas al Diario de Yucatán, quien además denunció en sus redes sociales el poco presupuesto destinado al mantenimiento y la conservación de los teatros del estado, tales como el Teatro Daniel Ayala, que permaneció cerrado por más de tres años hasta que, después de una remodelación, abrió sus puertas al público en octubre de 2023, y el Teatro Armando Manzanero, el cual tuvo su reapertura en marzo de 2024. Para la remodelación de ambos se destinaron más de 18 millones de pesos.
A través del portal oficial del gobierno del estado de Yucatán se informó que tanto el mismo como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) habían acordado rehabilitar de forma conjunta el Teatro Peón Contreras con una inversión de 120 millones de pesos. Aunque se espera que este año se reabra, aún no se tiene una fecha estimada para que así sea.
Cierre por desamparo del Museo MACAY
El Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán MACAY fue fundado el 29 de abril de 1994 con la finalidad de promover y difundir el arte moderno y contemporáneo en la Península de Yucatán, de acuerdo con la información que proporcionan en su sitio web.
Desde su fundación, el presupuesto destinado cada año por el gobierno del estado había sido fijo (16 millones de pesos), pero a partir del 2018 (que coincidió con el inicio de la administración de Mauricio Vila) hubo un recorte que hizo que quedara en 9 millones de pesos, declaró el director del museo Rafael Alfonso Pérez, quien en una conferencia de prensa señaló que se hizo otro recorte que dejó en el 2020 el presupuesto en 4 millones de pesos.
En el 2021 sólo contó con 2 millones de pesos para el funcionamiento de museo en la primera mitad del año, además de recibir por parte del Ayuntamiento de Mérida la cantidad de 240 mil pesos, pero no fue suficiente, ya que llegaron al punto de quedarse sin un peso, por lo que se cerraron las puertas de forma simbólica el 28 de julio de 2021.
Eventualmente el museo reabrió sus puertas, aunque de forma limitada, abriendo sólo un par de días por semana.
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