En pleno estado veracruzano, Andrés Manuel López Obrador calificó como corrupto y demagógico al gobernador de esa entidad, Fidel Herrera, porque engaña a los veracruzanos y aparece permanentemente en los medios de comunicación, en spots que superan en número a los pagados para promocionar a las Sabritas y Coca-Cola.

Tanto en Tierra Blanca, Veracruz, como en Tuxtepec, Oaxaca, pidió a la gente no creer en los candidatos del PRI ni del PAN, porque esos dos partidos políticos han sido los verdugos del pueblo y han llevado a la ruina al país.

Acompañado por los aspirantes de Salvemos a México, integrado por el Convergencia y PT, manifestó que está apoyando a ambas fuerzas políticas, porque sus candidatos serán buenos representantes del pueblo, “no importa que sean pocos, pero serán decididos y mejores”.

Para el presidente legítimo de México, “los candidatos del Convergencia y PT se distinguen porque tienen cabeza, corazón y carácter y porque representarán con dignidad al pueblo de México, además tendrán la fuerza para derrotar en las urnas a la oligarquía y para devolver el poder al pueblo”.