Taiwán.- Lian Kao es una joven estudiante en Taiwán, que uso los mismos lentes de contacto por seis meses seguidos, tras lo cual desarrolló una ameba que literalmente le comió el globo ocular izquierdo.
Según cuenta Lian, muchas veces ni si quiera se quitaba los lentes de contacto para dormir y los usaba al practicar natación.
El espacio entre el lente y el globo ocular puede parecer muy pequeño, pero logra albergar entre otras cosas, bacterias y amebas que derivan en diversos padecimientos. En el caso de Lian, una ameba unicelular devoró la visión de su ojo izquierdo.
Médicos que atendieron a la jovencita, apuntan que esto fue resultado de una mala higiene respecto al uso de los lentes de contacto. Fue así como en la lente comenzó a desarrollarse la ameba, misma que invadió la córnea y causó una infección conocida como queratitis.
"La falta de oxígeno pudo destruir la superficie del tejido epitelial, la creación de pequeñas heridas en la que las bacterias pueden infectarse con facilidad, que se extiende al resto del ojo y proporcionar un caldo de cultivo perfecto",explicó Wu Jian-liang, uno de los médicos que atendió a Lian en el Hospital Wan Fang.
Se supone que Lian debía haber dejado de usar esos lentes de contacto luego de un mes, pero en vez de eso, prefirió arriesgar su salud y permanecer con ellos hasta 6 meses. Jian-liang aprovechó para recordar que a la primera señal de irritación ocular, se deben retirar los lentes de contacto y acudir con un especialista para evitar problemas de visión mayores.
Tras este terrible caso, los expertos oftalmólogos recuerdan lo importante que es cambiar los lentes de contacto cada 4 semanas y no usarlos por más de 8 horas diarias.
Ahora el equipo de expertos del Hospital Wang Fang busca alternativas para devolver la visión del ojo izquierdo a Lian. Una solución podría ser el trasplante de córnea, pero debido a que la infección ya invadió el globo ocular, lo ven muy difícil.
Con información de IFLScience! y Tele5