Oigan, no. El espectáculo sexual de la parejita de enamorados que disfrutaron de un buen sexo oral durante el concierto de los Pixies en el Zócalo capitalino, nos dejaron una pésima idea en la cabeza.

Bien lo habíamos señalado antes, medio mundo después iba a creer que podían cumplir sus fantasías sexuales, no importando la hora ni el lugar, como esta otra parejita, que valiéndoles el tremendo show, tuvieron sexo en una sucursal de Santander de la avenida Juárez a la vista de todos. 

Para qué gastar en hotel, si ahí hay un cajero.

Y ya entrados en el momento, tampoco les produjo pudor que los transeúntes que paseaban por ahí los filmaran. Quizá ahora se sientan una especie de héroes, aunque los testigos han comentado que se encontraban en estado de ebriedad.