Los médicos aún no se explican cómo es que la británica de 32 años Vicky Green, desconocía que había gestado gemelos hasta dos semanas antes del parto.
"Mis periodos menstruales se habían detenido, pero simplemente lo atribuí al estrés", contó la hoy madre al Daily Mail. "Después me hice una prueba de embarazo y no me lo podía creer, no tenía barriga de embarazada porque los niños estaban recostados contra mi columna vertebral", agregó.
El día del parto, los médicos no tuvieron otra opción que sacar a uno de los bebés, dejando al otro en el útero. Presley pesó 680 gramos. Sin embargo, sus contracciones cesaron y el equipo de doctores le pidieron esperar.
Doce días después desarrolló una infección que orilló a los médicos a realizar una segunda cesárea para que Paisley, de un kilo 100 gramos, viera la luz por primera vez.