Una bebé nació con una cola de casi 6 centímetros (cm) en Nuevo León, México. Así lo dio a conocer la publicación científica Journal of Pediatric Surgery Case Reports, donde se analizó el caso.
El artículo destaca que el nacimiento de la bebé con cola se considera dentro de los parámetros “normales”, es decir, fue a través de una cesárea en un hospital rural, con un padre y una madre sanos y no consanguíneos, quienes ya habían tenido un hijo sano, sin este tipo de condición.
El estudio subraya que durante su embarazo, la madre de la bebé con cola no presentó complicaciones, ni estuvo expuesta a algún tipo de radiación o a teratógenos, capaces de causar un defecto congénito.
Médicos confirmaron una conexión nerviosa entre la cola y el cuerpo de la bebé
Los autores del estudio señalan que durante el embarazo de la mujer no identificaron algo anormal en la bebé, sino hasta que estuvo fuera del vientre materno.
En ese momento, los doctores detectaron que la bebé presentaba una estructura parecida a una cola de 5.7 cm de longitud y de entre 3 y 5 milímetros (mm) de diámetro, ubicada en la hendidura interglútea.
El estudio detalla que la cola de la bebé recién nacida era blanda, cubierta de piel y pelo fino, además de que se podía mover pasivamente sin dolor, pero no mostraba ningún movimiento espontáneo.
Para saber si la cola contaba con alguna conexión nerviosa, los médicos procedieron a pellizcar la extremidad con una aguja, lo que provocó el llanto de la bebé y confirmó el vínculo.
Médicos retiraron su cola a la bebé uando tenía dos meses y siguieron estudiando su extremidad
Tras el hallazgo, los médicos le aplicaron diversas pruebas a la bebé con cola:
- Una radiografía, para descartar irregularidades o estructuras óseas dentro de la cola
- Una ecografía abdominal, para descartar malformaciones renales y del tracto urinario o reflujo vesicoureteral
- Una resonancia magnética, para identificar anormalidades cerebrales
- Una exploración auditiva y cardíaca
El estudio subraya que los resultados de todas las pruebas descartaron irregularidades, por lo que la bebé con cola fue calificada como sana y dada de alta para seguimiento ambulatorio.
Al cabo de dos meses, la bebé con cola fue revaluada, encontrando que su extremidad adicional había crecido 0.8 centímetros, por lo que fue extirpada y la zona afectada reconstruida.
La cola fue sometida a más análisis en los que se reveló que estaba integrada por:
- Tejido blando, incluyendo tejido fibroadiposo
- Estructuras vasculares
- Haces nerviosos cubiertos por piel, sin alteraciones histopatológicas.
La bebé con cola fue dada de alta y hasta le fecha no ha presentado complicaciones por el retiro de su cola.