Todos pensamos que cuando un animalito nace siempre es tierno, dulce y perfecto, pero esto no tiene que ser completamente cierto, sin embargo, no porque uno de ellos sea distinto debería ser abandonado a su suerte.
Ese es el caso de Duo, una gatita que nació a mediados de este año en Estados Unidos. Se trata de un pequeño felino negro que por una característica física podría haber muerto a los pocos días, y es que Duo tiene dos caras, o como se diría científicamente, nació con una condición conocida como diprosopus.
En un inicio, el futuro de Duo era por demás incierto, pues, por un lado, los gatos como ella no tienen una esperanza de vida mayor a un par de semanas, y por el otro, no se sabía si alguien podría cuidar de ella ya que era sólo una más de la camada. Afortunadamente, el dueño de la madre atinó a pedir ayuda a Ralph Tran, un veterinario que viajó de Nueva York a California para ayudar.
Al conocer a la recién nacida, Ralph no lo pensó y decidió adoptarla para darle todos los cuidados que necesitaba y así tratar de que su corta o larga vida fuera feliz y mas sencilla de lo que podría haberle esperado con alguien que no supiera suficiente del tema.
Durante sus primeros días de vida, Duo no podía alimentarse por sí sola como usualmente lo hacen los de su especie que inmediatamente comienzan a mamar, ella tardó más de un día en comenzar a succionar del biberón con el que la alimentaban.
El animalito, que hoy tiene ya cuatro meses, también ha tenido algunos problemas para caminar, pues según relata Tran, una de sus cabeza parece querer ir en una dirección y la otra al lado contrario, lo que termina por derribarla, pero ya está aprendiendo a controlar esto también.
Con respecto a su imagen, Duo tiene dos caras que no terminaron de formarse y estas se unen por un “ojo” al centro que no es funcional y será operado cuando la gata tenga edad suficiente para someterse a una cirugía sin mayores riesgos.