Un gallo de pelea mató al policía Christian Bolok cuando se encontraba en la provincia de Sámar del Norte, Filipinas, intentando parar el combate. La noticia fue dada a conocer por el coronel Arnel Apud.

De acuerdo con el hombre, el policía fallecido llegó a la zona donde se llevaba a cabo la palea de gallos junto a otros compañeros, pero durante la redada sostuvo al animal entre sus piernas mientras recaudaba pruebas y este fue su fin.

Al parecer, el gallo golpeó con su hoja el muslo izquierdo y le cortó una arteria femoral, razón por la cual el hombre comenzó a desangrarse: "Nunca había visto algo así, fue un accidente que nadie se esperaba. Fue tan desafortunado y de tan mala suerte que no lo puedo explicar. No podía creerlo cuando se me informó", comentó a AFP Arnel Apud.

Asimismo, dijo que en sus 25 años como policía es la primera vez que pierde a uno de sus compañeros debido a una espuela de un gallo de pelea. Finalmente, con la redada se detuvieron a tres personas y dos gallos de pelea fueron confiscados, así como dos juegos de espuelas.

El caso recordó al del gallo 'Marcel', a quien un vecino asesinó "porque cantaba muy temprano" y cuya muerte no quedó impune gracias al resto de los habitantes de la comuna de Vinzieux, ubicada en Francia. Bajo el título de Déjenos cantar, los indignados residentes, quienes dicen haber quedado "profundamente conmocionados por este drama", piden que se respete el 'quiquiriquí' de las aves, pues está en su naturaleza.

Por su parte, el señalado admitió los hechos y será juzgado a principios de diciembre, mientras que el dueño del gallo expresó: "Lamento que el modo de vida en el campo se vea cada vez más afectado por comportamientos que no son castigados". Afortunadamente Marcel logró asegurar su descendencia antes de morir, de manera que aunque ya no se escuche su voz, Vinzieux podrá oír la de sus cinco polluelos.