Un hombre de 36 años comió tornillos para que le hicieran una prueba de coronavirus, luego de haber buscado en donde realizársela, pero sin ningún éxito. El hecho se produjo en la ciudad de Greenfield, Estados Unidos, el pasado 13 de octubre.
De acuerdo con medios locales, que compartieron recientemente la historia, el hombre comió los tornillos con la esperanza de que lo ingresaran al hospital y le hicieran la prueba. Posteriormente, acudió a una gasolinera y comentó lo que había hecho.
Allí, solicitó una ambulancia y fue trasladado a la sección de emergencias de un hospital local en condición estable. Más tarde confesó a los paramédicos lo que había hecho, asegurando que no había encontrado ningún lugar dónde poder hacerse la prueba de coronavirus. Hasta el momento las autoridades no han otorgado más detalles del incidente, pero informaron que el hombre no presentaba tendencias suicidas.
Según el Departamento de Servicios de Salud de Wisconsin, en la actualidad existen 42 centros de pruebas de coronavirus en el condado de Milwaukee, al que pertenece la localidad de Greenfield, incluido uno ubicado en el sur de esa zona, que todavía no estaba abierto cuando ocurrió el atípico suceso.
Desarrollan prueba que da resultados de coronavirus en 5 minutos
Para detectar el nuevo coronavirus hay dos tipos de pruebas de detección disponibles: las pruebas virales y las pruebas de anticuerpos. Una viral indica si actualmente tiene una infección, en tanto que una de anticuerpos podría indicar si anteriormente tuvo una infección.
El pasado octubre, científicos de la Universidad de Oxford desarrollaron una prueba rápida de Covid-19 capaz de identificar el coronavirus en menos de cinco minutos. Los especialistas de la institución británica informaron que ese test podría ser utilizado en pruebas masivas en aeropuertos y empresas.