Rebecca Munkombwe, una heroína de 11 años, residente de Sinderela, Zimbabue, estaba por salir de un arroyo en el que había nadado junto a otros siente niños cuando escuchó gritos de auxilio provenientes del agua; se dio cuenta de que Latoya Muwani, su amiga de 9 años, estaba siendo atacada por un cocodrilo.

Mientras la víctima ponía todas sus fuerzas en mantenerse a flote para evitar que el animal la arrastrara mas rápidamente, Rebecca tomó la determinación de saltar al lomo del depredador para intentar distraerlo y que así aflojara las fauces y dejara libre a su presa.

“Como yo era la mayor entre los niños, sentí la necesidad de salvarla. Salté al agua y nadé hacia ella” <br>

Rebecca Munkombwe

Al hablar con el medio local Sunday News Zw, Rebecca relató que cuando estuvo cerca del reptil notó que sus mandíbulas estaban trabadas en la mordida y lo primero que se le ocurrió hacer para que soltara la pierna y el brazo de la menor, fue golpearlo con sus puños.

Sin embargo, los golpes no daban resultado -probablemente porque no eran demasiado fuertes o contundentes -, así que la niña puso sus dedos en los ojos del animal y comenzó a hundirlos hasta que éste dejó de morder.

Una vez que liberó a su amiga de los dientes del cocodrilo, la acompañó nadando hasta la orilla, donde el resto de los niños la ayudaron a salir del agua.

Latoya fue trasladada al Hospital de San Patricio en donde la atendieron por “heridas leves” y espera recuperarse por completo en los próximos días.

Sobre el incidente, Fortune Muwani, el padre de Latoya dijo que al enterarse de que su hija había sido atacada por un cocodrilo pensó en lo peor, y que quedó totalmente sorprendido al conocer más detalles sobre la historia.

“No sé cómo Rebeca logró hacerlo, pero estoy agradecido con Dios. Latoya se está recuperando bien” <br>

Fortune Muwani