En redes sociales circula la historia de un niño quien se burló y humilló a una niña de escasos recursos quien juntaba botes para conseguir algo de dinero por lo que su tía decidió darle una lección y lo puso a vender chicles.

En una publicación con fotos de Facebook explican que, entre el menor de edad y sus amigos se habían burlado de una niña quien juntaba botes para ayudar a la economía de su familia y, para darle una lección, la tía de uno de los niños decidió ponerlo a vender chicles.

De acuerdo con la historia y las fotografías subidas a la red, al niño le colocaron un cartel en donde explicaba que vendía chicles porque había humillado a una niña de bajos recursos y, quien le cuestionara debía explicar lo que había hecho.

Supuestamente esta lección pretendía enseñar al niño el esfuerzo que implicaba para la niña hacer una actividad para generar recursos económicos para su familia, incluso a pleno sol del día; además de que ella realizaba esta actividad no por gusto sino por necesidad.

La publicación indica que el dinero que recaude de la venta de chicles se le dará a la niña, además de una disculpa cada vez que el chico que la vea.

Esta historia ha generado un debate en redes sociales pues hay quienes aseguran que el castigo fue algo exagerado por parte de los padres quienes únicamente hubieran explicado y enseñado el respeto muto; otros aseguran que el “castigo” fue algo ejemplar para enseñarle humildad a su corta edad.

Aunque no se sabe con exactitud la fecha de esta historia que se ha hecho viral, es una lección de humildad no solo para el pequeño sino para todos aquellos que muchas veces juzgan sin saber la historia de trasfondo.