Perder a un ser querido, es una de las desgracias mas terribles que debemos afrontar en la vida.
Pero para los niños puede resultar aún más desgarrador de lo que imaginamos.
Justo como el caso del niño que traemos a continuación.
Este niño perdió a su hermano mayor de 10 años, pero era tanto el amor que sentía por él, que no le fue tan sencillo aceptar su pérdida.
Esta historia se dio a conocer primero por TikTok, pero conmovió tanto a los internautas, que pronto comenzó a viralizarse por las demás redes sociales.
La historia comienza en el funeral del hermano mayor
La historia de este niño sucedió cuando se llevaba a cado el funeral de su hermano mayor.
No se sabe cual fue la causa de muerte del hermano, pero en el video se puede ver lo dolorosa que fue la pérdida del pequeño integrante de la familia.
La familia se encontraba en el funeral del niño del 10 años. Su papá y su mamá se encontraban devastados por la pérdida de su hijo.
Mientras el hermano menor se encontraba desconcertado porque sus papás no habían sabido como explicarle que su hermano mayor se había ido para siempre.
El niño desaparece
Pasan las horas y los padres junto con el niño se quedan dormidos en uno de los sillones de la funeraria.
Pero el niño, quien en todo momento va abrazando su peluche, despierta antes que sus padres.
Entonces se puede observar que el niño comienza a pasearse por la funeraria durante varios minutos.
Al principio no se sabe con exactitud hacia donde desea ir el pequeño. Pero finalmente lo vemos posarse enfrente del ataúd de su hermano.
¡Entonces ocurre lo inimaginable!
Sin dudarlo, y sin mostrar ningún tipo de temor o rechazo por la muerte, el niño se mete al ataúd junto con su hermano mayor.
Unos momentos después los padres del niño se despiertan y no tardan en notar la ausencia de su hijo.
Los padres comienzan a buscarlo, y al no notar ningún rastro de él entran en desesperación, por lo que piden ayuda al personal de seguridad.
Finalmente encuentran al pequeño dentro del ataúd
Luego de que el personal de seguridad revisó las cámaras, acuden con los padres del niño para darles la sorprendente noticia del paradero de su hijo.
Entonces, la mamá se apresura a sacar al pequeño niño del ataúd.
Finalmente logra sacar a su hijo del ataúd de su hermano, y ella junto con el papá comienzan a abrazar a su hijo para tratar de consolarlo.
Luego de muchos abrazos y una plática son sus papás, el niño decide dejarle su peluche a su hermano mayor dentro del ataúd.
De acuerdo con una fuente cercana a la familia, el niño se había metido al ataúd de su hermano, porque ellos tenían la costumbre de dormir juntos.
No se sabe con exactitud en qué lugar ocurrió este acontecimiento.
Pero no cabe duda que el amor de un hermano es un amor infinito y capaz de cruzar cualquier límite.