De no creerse lo que hizo una madre que obligó a su hija de 9 años de edad a someterse a una cirugía plástica para “verse bonita”.
Así como lo lees, esta lamentable historia ocurrió en Japón, donde las cirugías plásticas son legales para los niños si tienen el consentimiento de los padres.
Desde Vice Asia, en su serie documental Deadly Beauty de YouTube, se reporta este hecho que ha desatado fuertes críticas.
Las protagonistas de este caso son Rucchi y Micchi, esta última, una niña de tan solo 9 años de edad que se vio forzada a entrar al quirófano por deseo de su madre.
Rucchi hizo todo lo necesario para que su hija fuera sometida a una operación de blefaroplastia, tipo de cirugía plástica que extirpa el exceso de piel de los párpados.
En Asia, dicha cirugía estética, que también se le conoce como operación del doble párpado, es muy solicitada entre la población que desea suavizar sus rasgos orientales.
“Nunca he visto a una chica con monopárpados que pensara que era bonita. Los párpados dobles son hermosos, son el estándar de belleza. Digo esto una y otra vez”.
Rucchi, madre
Mamá obliga a su hija a someterse a cirugía plástica; pagó más de 55 mil pesos
Rucchi, la mamá en Japón que obligó a su hija Micchi de 9 años para que se hiciera una cirugía plástica y así verse “más bonita”, tuvo que desembolsar más de 55 mil pesos por la operación.
Esto con el objetivo de que a la niña le hicieran una incisión quirúrgica en los pliegues de sus párpados, y recortar así su piel flácida.
De acuerdo con el testimonio de Rucchi, ella también se sometió a la blefaroplastia cuando tenía 18 años y aunque confiesa que su vida no cambió, no se arrepiente de entrar al quirófano.
Aunque suene muy extraño o incomprensible, esta mujer declara que lamenta haberse hecho la cirugía plástica tan tarde.
Ya que ninguno de sus recuerdos de la infancia sean luciendo unos párpados “hermosos”.
Cabe señalar que la cirugía plástica de Micchie, que debía durar apenas unos 20 minutos, se complicó y se alargó dos horas.
Los internautas que han visto este caso consideran que la madre necesita terapia por cómo trata a su hija con la cirugía plástica.