Durante al menos dos horas, Megan Rixon perdió la vista, sufrió un terrible dolor y lagrimeó hasta sentir que se le acababa el llanto. La chica que le colocó unas uñas postizas utilizó pegamento para uñas, que es mucho más agresivo.
Según contó la víctima en sus redes sociales, la estilista ignoró sus comentarios sobre el dolor en los párpados y unos pequeños puntos blancos en su visión. De hecho la puso a descansar y cuando Megan intentó abrir los ojos, fue imposible, estaban pegados e irritados.
"Chicas deben ser muy cuidadosas con lo que se hagan en las pestañas. Me hice las mías en un lugar nuevo y usaron pegamento de uñas. Perdí la vista durante 2 horas. La hinchazón ha bajado, pero todavía hay dolor", escribió la joven.
{username} (@MeganRixson) October 19, 2018