Luis Miguel, Roberto Palazuelos, Gabriel Soto… son muchos los famosos que no conciben la vida sin estar bronceados, y aunque ese tono cobrizo resalta su belleza puede no ser lo mejor para su salud. Así lo comprobó Anthea Smith, una mujer de 44 años de Reino Unido, quien debido a su tanorexia perdió su oreja izquierda.

De acuerdo con el portal Sanitas, la tanorexia es un trastorno dismórfico corporal que consiste en una insatisfacción permanente con el tono de bronceado en la piel, lo que hace a las personas con este padecimiento someterse a sesiones intensas y prologadas de bronceado, ya sea bajo el sol o utilizando cabinas UVA.

Casi 30 años después de broncearse, apareció el melanoma en su oreja

Anthea Smith comenzó a usar camas solares desde que tenía 14 años. Casi tres décadas después, la mujer desarrolló melanoma, el tipo más grave de cáncer de piel, en la oreja izquierda. En entrevista con la BBC, Simith lamentó:

“Me siento muy culpable con mi marido y mis hijos, porque es algo que me hice a mí misma”.

Anthea Smith.

Le amputaron la oreja para evitar el avance del agresivo cáncer

Para evitar que el cáncer siguiera expandiéndose por el cuerpo de la mujer, en 2015 los médicos tuvieron que amputarle todo el órgano mediante dos cirugías.

“Me quitaron el oído interno, el medio, las glándulas salivales del lado izquierdo, y todos mis nódulos linfáticos”.

Anthea afirma que su médico no le prestó demasiada atención a su padecimiento hasta que en 2015, tras varias consultas, una biopsia reveló que Smith tenía un melanoma en estadio 3.

Afortunadamente, después de la extracción de su oreja, los análisis más recientes muestran que Smith se encuentra libre de cáncer, pero ella vive con el temor de que la agresiva enfermedad le regrese.

¿Qué es el melanoma y qué lo causa?

De acuerdo con la Clínica Mayo, el melanoma se forma en las células (melanocitos) que producen melanina, pigmento que le da color a la piel. Este tipo de cáncer también puede manifestarse en los ojos y, rara vez, en los órganos internos, como los intestinos.

Aunque no se conoce la causa exacta de todos los melanomas, la exposición a la radiación ultravioleta (UV) de la luz solar, las lámparas y las camas solares aumenta el riesgo de padecerlos, por lo que especialistas recomiendan limitar la exposición a la radiación UV para reducir riesgos. 

Con información de BBC y Clínica Mayo.