La pérdida de 'Vera', uno de los últimos cuatro rinocerontes blancos del mundo, resulta lamentable al tratarse de una especie en peligro de extinción. Su muerte se debió a su avanzada edad (tenía más de 60 años) y a problemas de osteoartritis degenerativa y enfermedad articular.

'Vera' pasó los últimos 10 años de su vida en la Hacienda Nápoles, en Colombia, luego de haber sido conducida en los ochenta por el líder del Cartel de Medellín, Pablo Escobar, para formar parte de su zoológico personal, según informa a AFP el propio director del parque Carlos Palacio.

En 1978 Escobar mando construir una lujosa mansión estilo colonial para su esposa e hijos que contaba con varias piscinas, lagos artificiales, gasolinera, pistas de aterrizaje de avionetas y helipuertos, una colección de autos y motos, establos de caballos y un zoológico con animales que compró ilegalmente. Tras su fallecimiento, 'Vera' fue llevada a Santa Fe, donde vivió por dos décadas hasta el 2008, cuando regresó a la hacienda.