Un sacerdote de Detroit, Estados Unidos, se ha convertido en el nuevo personaje viral de las redes sociales, tras difundirse fotos del peculiar método que utiliza para seguir dando la bendición a los fieles de su comunidad durante la pandemia de coronavirus, sin que ello implique riesgo de contagio. La clave de todo es el uso de una pistola de juguete.
Ante el confinamiento que se ha aplicado en diversas partes del mundo para contener la propagación del Covid-19, muchas personas han lamentado no poder acudir a la iglesia para encontrar alivio espiritual.
Con ayuda de su ingenio, Timothy Pelc, sacerdote de la parroquia de San Ambrosio, en Detroit, logró remediar la situación.
Fieles reciben "disparos" de agua bendita
El pasado Día de Pascua su comunidad pudo seguir con la tradicional bendición de canastas de comida sin que ello pusiera su salud en riesgo.
Todo fue posible gracias a una pistola de juguete que permitió al sacerdote disparar agua bendita sobre los alimentos y los creyentes, mientras cada uno de los asistentes respetaba la sana distancia.
En las fotos se puede ver que el párroco de 70 años de edad cumplió con rigor las medidas preventivas contra el Covid-19, pues además de aplicar el distanciamiento social, se le podía ver sosteniendo su Biblia con las manos cubiertas por guantes de látex.
También, usó una careta de plástico y cubrebocas, mientras los fieles pasaban frente a él a bordo de sus autos, al estilo de los autoservicios.
Aplauden en redes su ingenio para evitar poner en riesgo a los fieles
Las fotos de la peculiar bendición se viralizaron rápidamente en redes sociales, donde muchos usuarios aplaudieron el ingenio del sacerdote para poder seguir cumpliendo con sus actividades, sin que recurriera a conductas irresponsables, como ha sucedido con otros representantes religiosos y políticos en varios países.
"Qué 'compromiso único e inteligente' ante una situación muy difícil: gracias, padre Tim por mantener viva una de las tradiciones católicas más importantes!".
Susan M. Womack.