Un niño de 3 años fue salvado luego de que se tragó un clavo; el objeto de metal terminó en uno de sus pulmones.
Los hechos ocurrieron en Cuba, donde el menor tuvo que ser sometido a una cirugía de emergencia para sacarlo del riesgo en el que estaba.
Fue en el hospital pediátrico ‘Octavio de la Concepción y de la Pedraja’ de la ciudad cubana de Holguín, que el niño fue intervenido clínicamente.
Salvan la vida de niño que se tragó un clavo; cirugía fue “muy riesgosa”
De acuerdo con Mavil Isabel Benítez Fernández, doctora que presidió la operación del niño que se tragó un clavo, la cirugía fue “muy riesgosa”.
Según Jam Press, todo comenzó cuando el niño le dijo a su madre que le dolía la garganta. Razón que la preocupó y llevó a su hijo a un clínica local.
Lugar donde le hicieron unas radiografías que revelaron el origen del malestar del niño, quien tenía alojado un clavo en pulmón izquierdo.
Tras conocer el diagnostico, la madre del pequeño lo traslado al hospital pediátrico para que pudieran retirarle el objeto de metal.
Salvan la vida a niño que tragó un clavo; le realizaron una broncoscopia exploratoria
Durante la cirugía al niño de 3 años que se tragó un clavo, los doctores fueron muy cautelosos; ya que había mucho riesgo al realizar la broncoscopia exploratoria.
Operación que consiste en pasar un broncoscopio rígido de 6.7 milímetros a través de la laringe, la tráquea y el pulmón para extraer un cuerpo extraño.
La doctora Mavil Isabel Benítez Fernández explicó que si la broncoscopia exploratoria hubiese fallado, el niño hubiera presentado:
- Sangrado
- Rupturas traqueales o bronquiales
- Paro cardiorrespiratorio
- Muerte
No obstante, este caso fue exitoso y se extrajo el clavo en 25 minutos sin ningún tipo de complicaciones donde el paciente se reporta estable.
De acuerdo con Jam Press, este tipo de casos se han presentado en varias partes del mundo.
Por ejemplo, una anciana tenía un tornillo en un pulmón luego de que ella lo inhalara y se lo retiraron después de un año.
En España sucedió un caso similar, ya que un hombre tenía un tornillo de metal de 9 milímetros alojado en su pulmón.