Ante el auge de la inteligencia artificial, se ha presentado el miedo de que muchos trabajos queden obsoletos; sin embargo, también han llegado inesperados empleos.
Uno de ellos es el de “prompt engineering” o “ingeniero de peticiones”, que no es otra cosa que expertos en el uso de la inteligencia artificial.
Esto mediante el ingreso de las “palabras” adecuadas para que el programa entienda qué es lo que quiere una persona que genere la inteligencia artificial; sea imagen, video o texto.
Ellos ayudarían a la gente que no entiende el software o las máquinas en general, a darle un buen uso de acuerdo con lo que necesitan.
¿Cómo trabaja el “ingeniero de peticiones” con la inteligencia artificial?
De acuerdo con un artículo de El País, el “prompt engineering” o “ingeniero de peticiones” no trabaja directamente con el código de la inteligencia artificial.
Pau Martí Felip, un joven de 23 años y un de los primeros “prompt engineering”, señala que en su empresa no necesitan de muchos informáticos, sino de gente creativa.
Personas que entiendan bien lo que quiere la gente y cómo funcionan las peticiones de los programas de inteligencia artificial, introduciendo las palabras exactas en estos.
Los “ingenieros de peticiones” trabajan con el lenguaje tradicional, entrando a ChatGPT y solicitando alguna acción específica con un texto descriptivo de entre 1 a 8 líneas.
Asimismo, se menciona que más que saber “código”, es preferible que la persona sepa inglés; pues de momento, la inteligencia artificial responde mejor a dicho idioma.
Una de las razones de que se pidan requisitos tan bajos, es que se trata de un campo totalmente nuevo de trabajo, y en el cual no hay una formación como tal.
El mismo Pau Martí Felip señaló que él aprendió gran parte de inteligencia artificial y las “peticiones”, mediante videos en YouTube y TikTok.
¿El “ingeniero de peticiones” de inteligencia artificial tiene futuro?
Obviamente hay mucho escepticismo sobre el papel que tendrá en un futuro el “prompt engineering” o “ingeniero de peticiones” de inteligencia artificial.
Pau Martí Felip es un defensor de su trabajo, mencionando que la llegada de la inteligencia artificial a varios campos, necesitará forzosamente de alguien que la entienda.
Junto con él tenemos a Silvus Pitis de la Universidad de Toronto y el ingeniero Simon Willison, quienes señalan que los programas se harían cada vez más complejos.
Además de que se requerirá de una persona que esté al tanto de lo que haga la inteligencia artificial, una especie de control de calidad para que el programa no arroje datos falsos.
Sin embargo, Javi López, inversor y experto en IA, así como Pablo Moreno-Muñoz de la Universidad de Dinamarca, señalan que el “prompt engineering” será obsoleto.
Esto debido a la misma evolución cultural tecnológica, donde las nuevas generaciones aprenderán de la inteligencia artificial de manera empírica, simplificando procesos.
Además los programas se integrarán de manera natural a los diversos trabajos; Javi López pone de ejemplo a los “expertos de Excel”, que son obsoletos pues la Contaduría incorporó el software.
Se estima que en una década a lo mucho, el “prompt engineering” dejará de ser una profesión real, para pasar al olvido.
Con información de El País