Ahora que salió la última versión de Windows 11, ¿ya te estás preparando para actualizar tu computadora?
Actualizar el sistema operativo de una computadora es altamente recomendado por expertos, ya que suele ser esencial para:
- Garantizar su seguridad
- Rendimiento óptimo
- Compatibilidad
- Estabilidad
Sin embargo, en el caso de Windows 11, hay varias razones por las que podrías querer pensarlo dos veces antes de hacerlo; a continuación te las presentamos.
Windows 11: Estos son los problemas a los que se estarían enfrentando los usuarios tras la nueva actualización
Algunos usuarios que ya actualizaron su computadora con Windows 11 a la versión de febrero (KB5051987) han reportado que desde entonces su equipo ha presentado diversos problemas, como:
- Bugs (fallos en programas de software que causan un comportamiento inesperado o incorrecto)
- Errores
- Bloqueos
Pero, el fallo más grave estaría relacionado con la app del Explorador de Archivos, que al actualizarse a Windows 11 estaría presentando dos situaciones principales de riesgo:
- Removería todo, llegando a provocar reinicios, cierres inesperados, entre otros problemas
- Estaría dejando de funcionar
Los pocos usuarios que sí podrían navegar por el Explorador de Archivos se estarían enfrentando a:
- Bloqueos constantes
- Imposibilidad para cerrar las pestañas
- Que la app se siga ejecutando en segundo plano y consumiendo recursos, tras conseguir forzar el cierre
Otros usuarios que han actualizado a Windows 11 han reportado que no pueden navegar de forma correcta por el explorador de archivos ni entrar a las carpetas que contienen sus documentos.
¿Cómo evitar que tu computadora se vea afectada por la actualización de Windows 11?
Ante la problemática situación de Windows 11, hay quienes recomiendan que si tu computadora funciona bien con la versión anterior de Windows, será esperar a que Microsoft solucione los problemas.
El asunto en este caso es que Microsoft lanzó Windows 11 como una actualización obligatoria, por lo que todas las computadoras deben instalarla para poder seguir utilizando Windows.
Una forma como los usuarios podrían retrasar la actualización a Windows 11 sería desactivando las actualizaciones automáticas.
Otra recomendación es hacer un respaldo de los archivos, para poder conservarlos en caso de que la actualización siga fallando.
