El Día jueves 23 de junio en Italia y Kazajstán, Google informó que el spyware italiano ‘Hermit’, había hackeado teléfonos iPhone y Android.
De acuerdo con el comunicado, rescató AFP, el spyware ‘Hermit’ fue lanzado y creado por la firma RCS Lab con sede en Milan, Italia.
Esto se cree se realizó con el motivo de espiar teléfonos inteligentes con los sistemas iOs y Android mediante una “combinación de tácticas”, entre ellas la descarga oculta.
¿Qué es Hermit, el spyware italiano?
De acuerdo con Lookout, especialista en ciberseguridad móvil, Hermit es un software espía que solo se vende a clientes con un uso legítimo de software de vigilancia, como:
- Agencias de inteligencia
- Agencias de aplicación de la ley
Sin embargo reveló que a menudo, estas herramientas se utilizan para espiar a diversos funcionario del gobierno y otros personajes sobresalientes en otro ámbitos.
“Se ha abusado de tales herramientas bajo el pretexto de la seguridad nacional para espiar a ejecutivos de empresas, activistas de derechos humanos, periodistas, académicos y funcionarios gubernamentales”
Lookout
Asimismo reveló que esta no sería la primera vez que se utiliza al spyware para espiar teléfonos inteligentes, puesto que en abril fue utilizado por el gobierno de Kazajstán.
Esto tan solo unos meses después de que se reprimieran las protestas antigubernamentales en el país; por lo que es probable Hermit y otros spywares se utilice en muchos otros lugares del mundo.
“Según la información que tenemos, tiene una presencia internacional considerable”
Lookout
¿Cómo funciona Hermit, el spyware italiano?
Según el equipo de análisis de amenazas de Google, el spyware Hermit hackeó a los teléfonos usando una combinación de tácticas que incluyen “descargas ocultas”.
Es decir, estas descargas inusuales, ocurren sin que las víctimas se den cuenta; una vez instalado, el software espía recopila:
- Registros de llamadas
- Fotos
- Mensajes,
- Correos electrónicos
- Ubicación de dispositivo
- Graba audio ambiental
- Redirige llamadas telefónicas
En Italia, las preocupaciones sobre el software espía crecieron tras informarse que el año pasado algunos gobiernos utilizaban los programas Pegasus de la empresa israelí NSO para vigilar a opositores, activistas y periodistas.